2010/02/14

El amor en microrrelatos


Con motivo del Día de San Valentín, la biblioteca del Centro convocó un Certamen de Microrrelatos para el alumnado de bachillerato. Por supuesto que nos presentamos y nos llevamos los tres premios. Aquí os los dejo, así como algunos más que llegaron a la final. ¡Enhorabuena a las premiadas!

Tras el berrinche de Cupido con el dios de los truenos por haber enamorado a su hija, el dios del amor bajó de nuevo a la Tierra a por nuevas conquistas. En su descenso notó un fuerte pinchazo en el costado: un enorme rayo de Zeus le había atravesado la espalda. Ahora ya no podría utilizar sus encantos físicos para enamorar a las doncellas, si no que tendría que utilizar el rayo como flechas para hacer que nuevas almas se enamoren. Y así por los siglos de los siglos...
Por Raquel

Las huellas que deja el amor en el corazón se leen.
¡Aprende a leer!

Por Sonia

Podría decirte que aún te quiero... Pero, ¿para qué? ¿Para sufrir? ¿Para arreglar las cosas? No, nada de eso funcionaría... Ya no... De que serviría decirte qué me gusta como suena mi nombre en tu boca. No vas a volver a pronunciarlo.

El amor es una mentira que te atonta despacio y lentamente...Pero una mentira al fin y al cabo... Es como una enfermedad en busca de su diagnóstico, de su resonancia emocional.

Solo después de una larga noche de borrachera pienso en esto. Pero es solo en esos días. Después el sentimiento de soledad se me pasa... Y entonces recapacito y pienso en que te fuiste. Y, ahora, tendré que buscar trabajo.


Por Lucía

Nunca le gustó el maquillaje. Guardaba verdades como puños entre sus labios. Su pelo suplicaba un tinte. Consiguió hacerse a sí misma y ser su propia jefa. En toda su vida recibió el cariño de una única persona: su perro.

Por Emma

Ella espera ilusionada en el banco de siempre. Él la ve desde el otro extremo de la calle. Ella escucha un estruendo horrible y se gira. Él ya no la ve. A cámara lenta ella se desliza hacia la carretera y sólo encuentra un ramo de rosas tiradas, y entre los gritos de la gente horrorizada, que ella ya no escucha, ve una nota en el suelo. Venía con las rosas y terminaba en un “Te quiero”.

Por Rocío


Entreabrió los ojos la oveja, esperando la llegada de su amado que había pasado la noche con una cabra. Ahora iba a haber más que baladas.

Por Yajaira

Para acabar, qué sería de este día sin una buena historia de amor, como esta:
Un corto del ruso Konstantin Bronzit- Lavatory – Lovestory- que presenta una relato de amor en un escenario diferente: un baño público. Sin diálogos, esta es una emotiva y divertida historia de amor en 10 minutos.


No hay comentarios: